Los Balnearios Termales de Chocontá están ubicados a 75 kilómetros de Bogotá. Para llegar allí, se debe tomar la doble calzada Bogotá–Tunja. Antes de llegar al municipio de Chocontá, y luego de haber pasado por la Represa del Sisga y su emblemático puente, se debe girar por el desvío a la derecha hacia los municipios de Machetá y Garagoa, ruta que conduce a los Llanos Orientales, hasta encontrar la señalización de las termales.

Ricas en componentes minerales, las termales son las aguas que brotan de las capas subterráneas a una temperatura superior a los 5 grados centígrados. Generalmente se localizan a lo largo de fallas sísmicas a través de las cuales se filtran y ascienden en forma de vapor o de agua caliente.

Se cree que ya en la Edad de Piedra, los hombres conocían las propiedades benéficas que las aguas termales aportaban a la salud, conociéndose balnearios que datan de 2000 a.C. en Mojenjo-Daro, India; en Epidauros, Creta, entre 1700 y 1400 a.C.; en la Antigua Grecia y en Tel el-Amarna, en 1360 a.C., y en el Antiguo Egipto. El continente americano no fue excepción, como sucedía en algunas regiones de la Sabana de Bogotá, los nacimientos de aguas termales se constituían en lugares sagrados para los muiscas y eran el lugar de descanso para los caciques y su sequito.