El Páramo de Guerrero está localizado entre los 3.000 y 3.900 metros sobre el nivel del mar, en los cerros occidentales de la Sabana de Bogotá, marcando el descenso hacia el valle del Magdalena, hacia el territorio de los Panches, enemigos clásicos de los muiscas.

Este páramo es una reserva protectora liderada por Conservación Internacional y apoyada por las alcaldías de los municipios que tiene jurisdicción en este. Allí se encuentra protegida una incalculable diversidad de plantas y animales propios de este ecosistema, como curíes, (Cavia porcelus), venados, (Odocoelius virginianus). Así mismo, en el páramo de Guerrero se pueden encontrar importantes atractivos naturales de importancia ecológica como la Laguna Verde, rodeada de frailejones (Espeletia spp), chites (Hypericum spp) y Cardos (Puyas spp), plantas típicas de las altas montañas andinas tropicales.