Este imponente páramo, que hace parte del sistema Chingaza,
es la principal reserva hídrica y de biodiversidad de la Sabana de
Bogotá, en especial para los municipios de Sesquilé, Machetá y
Guatavita. En él nacen muchos ríos y quebradas que además de
alimentar diferentes acueductos veredales y municipales también
nace el Río San Francisco, principal tributario del Embalse del
Sisga.
En cuanto a biodiversidad el Páramo de Guatanfur es uno de los
tesoros ocultos de la Sabana de Bogotá. De esta manera, en él
podemos encontrar varias especies de plantas características de
los paramos como los frailejones, el mayor exponente de estos
es el Frailejón Gigante (Espeletia uribeii). En cuanto a fauna
se pueden encontrar especies tan representativas como el
Oso de Anteojos (Tremacthus ornatus), el Venado de Cola
Blanca (Odocoelius virginianus) y las águilas de páramo
(Geranoaetus melanoleucus). Especies que a veces se cruzan
en nuestro camino cuando visitamos el páramo.
Debido a su posición estratégica como conexión entre la Sabana
de Bogotá y los Llanos Orientales este lugar fue un punto neurálgico
en el comercio de ganado entre estas dos regiones. Así pues,
en el lugar se pueden encontrar diferentes senderos y caminos
que comunican con los municipios de Machetá, Gachetá, Manta
y Guatavita. Lo que hoy representa una gran oportunidad para el
turismo, la conservación y uso sostenible del territorio